TV REGIONAL

Con un presupuesto casi siete veces mayor en los últimos años, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) salió a sacar lustre al aporte que viene realizando al sector, esencialmente en materia de conocimiento y asesoramiento profesional, que redundan en crecimiento económico para los productores.

En el marco de una jornada especial que se realizó en la Universidad Católica (UCA) de Buenos Aires, el organismo destacó que “entre las ventajas que capitalizan, la principal es el aporte de 230 millones de dólares que anualmente hacen al sector agropecuario”, a través del conocimiento y asesoramiento que otorgan y permiten aumentar el valor de la producción evitando pérdidas en la cosecha de cereales y oleaginosas.

Carlos Casamiquela, presidente del Inta, alertó sobre los riesgos del acelerado proceso de agriculturización que está instalando una nueva matriz productiva. Frente a eso, el instituto está pensando en la creación de una unidad de prospectiva para alertar e indagar sobre nuevas tecnologías al respecto.

El Inta es un organismo creado en 1956, durante el gobierno de Arturo Frondizi, con el propósito de “impulsar y vigorizar el desarrollo de la investigación y extensión agropecuarias y acelerar con los beneficios de estas funciones fundamentales: la tecnificación y el mejoramiento de la empresa agraria y de la vida rural”. Depende del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, con autarquía operativa y financiera.

Sin embargo, a lo largo de su historia tuvo marchas y contramarchas, entre estas últimas una de las que más fuerte lo marcaron fue la gestión menemista durante los años 90, donde pasó por varios intentos de privatiazación y estuvo sometido a una fuerte reducciòn de su presupuesto.

En 2010, según precisó Casamiquela, el presupuesto es siete veces mayor que hace siete años. Pasó de 156 millones de pesos (promedio 2002/2003) a 1.023 millones (promedio en 2009/10).

En el mismo sentido explicó que se multiplicaron las inversiones, al pasar de 2,4 millones de pesos por año en promedio en el período 1999/2003 a los 54 millones erogados en promedio por año entre 2004/2010.

“El Inta está teniendo muchos logros, uno de los más importantes es el aporte de nuestro proyecto de pérdidas de cosecha, que redundó en una ganancia de 230 millones de dólares por campaña”, señaló el directivo.

Por otra parte, analizó también la situación del sector. En virtud de eso, es que el Inta está modificando sus políticas para adecuarse a las nuevas demandas. “Hoy se observa, por ejemplo, que la agriculturización está instalando una nueva matriz productiva a la que hay que prestarle atención”, señaló.

Explicó que la ganadería va seguir produciendo pero no en las áreas tradicionales. “Hay un desplazamiento geográfico, por lo cual se está pensando una nueva perspectiva de desarrollo tecnológico al respecto”, indicó el presidente del Inta.